Cómo llevar una bufanda

Para protegerse de las bajas temperaturas o como un detalle en un conjunto, en el armario de un hombre no pueden faltar unas bufandas. Pero la cuestión es: ¿cómo anudar correctamente una bufanda al cuello? Hay nudos demasiado informales, mientras que otros son demasiado formales para según qué situaciones.

Descubra la guía de anudar bufandas de BOSS en cada ocasión y con cada conjunto. Estas formas de envolver y anudar valen para todo tipo de bufandas, desde las gruesas de lana hasta los diseños más ligeros de cashmere.

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Al vestir de traje, es importante mantener las líneas limpias y nítidas del corte para causar una buena impresión. En este caso, la bufanda va bien con un nudo sencillo y elegante. Dóblela por la mitad a lo largo, déjela caer sobre el cuello y pase los extremos por el bucle.

Ajuste el nudo a su medida para protegerse del viento e ir cómodo. Vista como vista, este método de anudar la bufanda es siempre elegante y adecuado para un traje. También queda bien bajo las solapas de un abrigo cortado a medida.

En ocasiones que requieren un look sofisticado, no siempre es necesario recurrir a un traje. Con un conjunto más relajado pero sin renunciar a nada de elegancia, enrolle la bufanda por el cuello y déjela caer aproximadamente un tercio de su longitud. Seguidamente, tome el otro extremo y póngalo sobre el otro hombro.

Esta forma de llevar la bufanda es ideal para ocasiones más informales donde conviene mantener una cierta dosis de elegancia. Funciona igual de bien por encima de una camisa , un jersey o un blazer, en función del look.

Para un look casual, vestir cada prenda con naturalidad y según como queden forma parte del atractivo. Por eso, la bufanda debe reflejar un aire igualmente desenfadado. Simplemente envuelva la bufanda de su elección alrededor del cuello y tire de los extremos para ajustarla.

Este método va bien con bufandas de diferentes tamaños, pero resulta especialmente abrigado con un diseño grueso y voluminoso. Llévela envuelta por encima de un abrigo o una chaqueta para protegerse de las inclemencias.

Al vestir una bufanda a juego con un esmoquin, es más importante que nunca mantener el mismo nivel de elegancia de sastrería. En este caso la mejor elección es una bufanda diseñada especialmente para este estilo. Debe ser de un material fino como la seda o el cashmere, y de un color parecido al del traje. Un estampado sutil, por ejemplo de lunares o rayas, es ideal para aportar un toque de detalle al look.